Hoy en día, con nuestro ritmo de vida acelerado muchas personas dicen tener cansancio y sentirse agotadas. ¿Existen vitaminas para el cansancio en la mujer?
Cansancio en la mujer, ¿Qué motivos puede haber?
Es muy común achacar el cansancio con nuestra actividad al cabo del día. Pero el problema aparece cuando ese cansancio es excesivo comparado con la actividad que realizamos. Es entonces cuando tenemos que buscar otras causas que lo provoquen. Entre las causas de este cansancio podemos encontrar:
- La edad. A medida que vamos aumentando la edad, el proceso de “recargar pilas” de nuestro cuerpo se hace menos efectivo, es por eso por lo que según van pasando los años nos vamos sintiendo más cansados
- Aumento de responsabilidades y mayor nivel de estrés. Es muy común que personas que tienen muchas cosas en mente se sientan más cansados
- Ciertas enfermedades. Muchas veces ese cansancio excesivo nos está indicando que algo está pasando en nuestro cuerpo. El cansancio es un síntoma común en enfermedades tiroideas y diabetes mal controladas.
- Mala calidad del sueño. En el cansancio influyen tanto las horas de sueño como la calidad de estas y puede ser una explicación a ese aumento del cansancio.
- Dieta desequilibrada. Dietas ricas en azúcares, harinas refinadas y ultraprocesados, suelen ser bajas en frutas y verduras. Este tipo de alimentación se asocia a un mayor cansancio corporal debido a que pueden causar deficiencias de vitaminas y minerales implicados en el metabolismo energético.
- Efecto de algún fármaco. Muchas fármacos presentan como efecto secundario la fatiga o somnolencia.
¿Cómo podemos mejorar ese cansancio?
Lo primero es encontrar el motivo de ese aumento de cansancio. Para ello lo principal es descartar que este aumento de cansancio nos esté indicando alguna enfermedad. Cuando hemos hecho las pruebas y exámenes necesarios para descartar una enfermedad de base, podemos hacer ciertos cambios en nuestro día a día para reducir ese cansancio:
- Podemos hacer una lista de las tareas que tenemos que hacer y ordenarlas por prioridad, así podremos seguir un orden para optimizar nuestro tiempo y ser más productivos.
- Mejorando nuestra dieta. Es importante llevar a cabo una alimentación con un consumo medio-alto de frutas, verduras y legumbres y reducir o eliminar azúcares, harinas refinadas y productos ultraprocesados.
- Reduciendo nuestros niveles de estrés mediante la práctica de meditación o ejercicio físico, esto también nos ayudará a dormir mejor y mejorar nuestro cansancio.
Además de estos cambios en nuestro día día, existen ciertas vitaminas y minerales para el cansancio específico en las mujeres.
¿Existen vitaminas y minerales para combatir el cansancio en la mujer?
Muchas veces mejorando la alimentación mejora el cansancio, pero en muchas otras ocasiones necesitamos una ayuda extra por parte de suplementos de vitaminas y minerales. Concretamente existen ciertos micronutrientes que son de especial interés ya que participan en el metabolismo energético como pueden ser:
- Vitaminas del grupo B. Principalmente la vitamina B12 y ácido fólico. Entre los síntomas de la deficiencia de vitamina B12, destacan el dolor de cabeza, problemas gastrointestinales, inflamación y la fatiga. La fatiga se desarrolla por una alteración de la producción normal de glóbulos rojos. Al haber un menor número de glóbulos rojos disminuye la capacidad de transporte de oxígeno, lo que se relaciona con la aparición de fatiga. Por otro lado, entre las causas que generan déficit de ácido fólico pueden ser tanto, debido a la dieta como a diversas enfermedades, pero la característica principal, es que suele estar relacionada con la anemia megaloblástica, responsable en gran parte de la fatiga característica por la falta de esta vitamina y que puede llegar a ser persistente en el caso de no corregir la deficiencia. Para evitar o remediar las situaciones de deficiencia hay que incluir en la dieta alimentos ricos en acido fólico como vegetales de hoja verde, guisantes, cítricos, huevos, judías pintas, salvado de trigo.
- Calcio: La hipocalcemia aparece cuando los niveles de calcio en sangre se encuentran por debajo de lo normal. En estas situaciones aparecen alteraciones orgánicas como problemas musculares, osteopenia y osteoporosis y fatiga extrema entre otras. Esta fatiga por deficiencia de este mineral también puede estar asociada a aturdimiento, confusión mental y falta de concentración. Para evitar o remediar las situaciones de deficiencia hay que incluir en la dieta alimentos ricos en calcio como los lácteos (queso, yogur, leche), alubias, brócoli, leche vegetal fortificada, frutos secos y semillas.
- Hierro: La falta de hierro causa principalmente anemia. Se caracteriza por presentar síntomas como mareos, dolores de cabeza, latidos irregulares, falta de aire o fatiga generalizada. La fatiga se desarrolla porque nuestro organismo carece del hierro suficiente para producir hemoglobina que es la principal responsable del transporte de oxígeno en nuestro cuerpo. Ante la disminución de la hemoglobina, llega menos oxígeno a nuestros músculos y órganos, lo que provoca un cansancio generalizado.
- Vitamina D: La vitamina Des muy importante para muchas funciones corporales y su deficiencia es algo muy común. Entre sus síntomas destacan una debilitación del sistema inmune, problemas óseos, disminución de la cicatrización y fundamentalmente fatiga y cansancio. Varios estudios han demostrado la relación entre la fatiga y los bajos niveles sanguíneos de vitamina D. Para evitar o remediar las situaciones de deficiencia hay que incluir en la dieta alimentos ricos en vitamina D como los pescados azules, cereales y leche fortificados y yema de huevo además de la exposición solar diaria.
En Laboratorio Cobas contamos con una línea de suplementos vitamínicos “Orthomol” y concretamente, contamos con uno específico para el cansancio en la mujer al contar con vitaminas y minerales que participan en el metabolismo energético.